El PIB del tercer trimestre da una sorpresa negativa: Dapper

La economía colombiana registró un crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB) de 2,0 % anual desestacionalizado en el tercer trimestre de 2024 (3T24), ligeramente por debajo del consenso de analistas, que esperaba un 2,1 %. 

Según un análisis de la plataforma de asuntos públicos Dapper, este resultado amplifica los temores de una recuperación económica más lenta de lo anticipado, lo que incrementa los riesgos fiscales y eleva las expectativas de que el Banco de la República tome medidas más agresivas, como una reducción en las tasas de interés, para dinamizar la economía.

Aunque el crecimiento anual mostró una leve aceleración frente al segundo trimestre (1,9 % en 2T24), la variación trimestral del PIB fue de apenas 0,2 %, marcando una desaceleración frente al 0,5 % registrado en el trimestre anterior.

Para José Linares, cofundador de Dapper: "Los resultados del tercer trimestre revelan un riesgo claro de desaceleración en la recuperación económica. Este desempeño inferior a las expectativas no solo obliga a replantear las proyecciones para el cierre de 2024 e inicio de 2025, sino que también incrementa la urgencia de implementar políticas que reactiven sectores estratégicos y aseguren un crecimiento sostenible".

En línea con lo anterior, el análisis destacó que los componentes del PIB en el tercer trimestre de 2024 reflejan una dinámica mixta desde la perspectiva del gasto, con señales de avance en algunos sectores, pero también con importantes desafíos que limitan el impulso hacia una recuperación económica más robusta.

• Inversión: Aunque la tasa anual de crecimiento fue del 4,06 %, la inversión sigue por debajo de los niveles prepandemia, alcanzando apenas el 91,67 % del nivel observado en 2019. Sectores clave como la vivienda y las infraestructuras muestran señales de alarma por su estancamiento.
• Consumo privado: Registró un crecimiento anual del 1,64 %, consolidando su recuperación desde el 2T24 y actuando como un dinamizador del PIB.
• Gasto público: Contrario al comportamiento del consumo privado, el gasto público se contrajo un 4,35 % anual, lo que contribuyó a ralentizar el crecimiento.

“Desde el lado de la oferta, sectores como la agricultura y las actividades artísticas y de entretenimiento impulsaron el PIB, mientras que la construcción, la industria manufacturera y la explotación de minas y canteras continuaron enfrentando dificultades, con contribuciones nulas o negativas al crecimiento.” señaló Linares.

Perspectivas económicas

La sorpresa negativa del PIB incrementa las presiones fiscales, debido al posible menor recaudo tributario derivado de un crecimiento inferior al esperado. Sin embargo, esta situación también podría acelerar la decisión del Banco de la República de realizar recortes más agresivos en la tasa de interés, con el fin de estimular la economía y cerrar la brecha de producto.

A pesar de los desafíos, el repunte del consumo privado y el crecimiento en sectores como la agricultura ofrecen señales positivas, pero no suficientes para compensar el estancamiento en sectores estratégicos como la construcción y la industria manufacturera.

“La recuperación económica de Colombia sigue siendo frágil, con una economía creciendo por debajo de su potencial y riesgos que podrían limitar su desempeño en el corto plazo.” finalizó el experto.