Inversión en Colombia: la clave de la reactivación según Asobancaria

Mario Pardo llamó la atención sobre tres puntos: la inversión es clave para Colombia, los niveles de inversión son muy bajos en el país y propone algunas sugerencias para aumentar la inversión.

La importancia de la inversión

En primer lugar, es crucial entender que "solo hay un alto desarrollo social si hay un alto crecimiento económico", afirmó el presidente de la junta directiva de Asobancaria. Para él, lo que más contribuye al desarrollo social es el crecimiento económico. En un país como Colombia, "solo eliminaremos la pobreza si conseguimos acelerar el crecimiento económico". Los economistas han demostrado ampliamente que lo que más impacto tiene en el desarrollo económico es la inversión, especialmente la privada.

Por tanto, aunque no sea condición suficiente, la inversión es la condición más necesaria para el desarrollo económico y social de un país. No hay nada que tenga mayor impacto en el desarrollo social de Colombia que la inversión privada.

¿Por qué la inversión es tan baja en Colombia?

Prosiguió Pardo que Colombia tiene unos niveles de inversión muy bajos, de hecho, más bajos que cualquier otra región del mundo y apenas la mitad que Asia Oriental. Los motivos son varios, pero el principal es un muy bajo nivel de ahorro en Colombia. 

La tasa de ahorro es más baja que en cualquier otra región del mundo, aproximadamente la mitad que en Latinoamérica y la cuarta parte que en Asia. Este se debe a bajos niveles de ahorro tanto en las familias, como en las empresas y en el sector público. En Colombia, esta situación va de la mano de un alto nivel de consumo que, como porcentaje de la economía nacional, es más alto que en cualquier otra región del mundo.

El alto apetito por el consumo también se refleja en el peso de la cartera de consumo del sector financiero, que es de las más altas de Latinoamérica y del hemisferio occidental. Por tanto, el primer factor para explicar la baja inversión es que hay un bajo nivel de ahorro y un alto nivel de consumo. Esto obliga a preguntarse a qué se debe este bajo nivel. Probablemente haya aspectos socioculturales e históricos involucrados, ya que el ahorro suele ser más bajo en países en conflicto armado, y Colombia ha tenido muchos años de conflicto. Sin embargo, también hay aspectos de política pública que pueden estar penalizando el ahorro y la inversión, y favoreciendo el consumo.

Un segundo motivo es que una parte importante del ahorro no es productivo a efectos de financiar inversión, ya que se queda en efectivo y no entra al sector financiero. Colombia tiene un alto uso del efectivo: representa el 14% de la masa monetaria y las transacciones en efectivo el 78% del total. Esto genera problemas adicionales como la corrupción, la financiación de actividades ilícitas y el bajo recaudo de impuestos.

Finalmente, para Pardo, el alto uso de efectivo impide el conocimiento transaccional adecuado de las personas y los negocios, limitando la profundización e inclusión financiera.

Un tercer factor relacionado con el ahorro es que una parte importante del ahorro formal sale del país y no se destina a financiar la inversión en Colombia. En 2023, los colombianos tenían USD 256 mil millones de dólares en activos en el exterior, equivalente al 72% del PIB. Si este ahorro se invirtiera en mayor medida en Colombia, tendríamos más depósitos, más inversión, mayor PIB y mayor desarrollo social. Esto se debe a la fiscalidad del ahorro en Colombia, la imposibilidad de tener cuentas en dólares y la regulación que favorece la estabilidad de las inversiones institucionales en el exterior.

En términos de masa monetaria, aumentar la masa monetaria de Colombia podría ser una solución, pero dado el alto porcentaje de consumo en la economía, es probable que esto no se convierta en inversión productiva y sí en consumo e inflación. Por ello, es necesario primero transformar la economía hacia una más ahorradora, inversora y exportadora antes de considerar un fuerte aumento de la masa monetaria.

Propuestas para aumentar la inversión, según Asobancaria

Cómo aumentar el ahorro:

● Incentivar fiscalmente el ahorro y/o desincentivar fiscalmente el consumo.

Cómo reducir el uso del efectivo:

● Implementar el sistema de pagos inmediatos de bajo valor del Banco de la República.
● Con obligatoriedad de pagos electrónicos para transacciones de alto valor y de trámites
con el sector público nacional y local.
● Eliminar el recaudo anticipado de impuestos atados a pagos electrónicos (Retefuente,
ReteICA).

Cómo exportar menos ahorro colombiano e importar más ahorro extranjero:

● Permitir cuentas en dólares y otras divisas en Colombia.
● Incentivar regulatoriamente la inversión del ahorro institucional público y privado en
Colombia (vs. en el exterior).
● Permitir la compra de CDTs a extranjeros en el mercado primario.
 

Cómo aumentar la capacidad de financiación de la inversión por parte del sector privado:

● Incentivar regulatoriamente la cartera comercial (vs la cartera de consumo).
● Asegurar que el ahorro pensional y asegurador se invierta en mayor medida a largo
plazo en el sector privado colombiano (vs el corto o el medio plazo).

Cómo aumentar el atractivo de la inversión:

● Aumentar la disciplina fiscal pública para reducir el riesgo país y las tasas.
● Aumentar el peso de la inversión pública en el presupuesto (vs. el gasto público).
● Política pública que apoye a los sectores exportadores.
● Reducir la tributación al sector productivo (vs. los impuestos al consumo).
● Trabajar todos, sector público y privado, sector real y financiero, en una cultura más
propositiva, centrada en lo que nos une y en construir sobre lo construido.

"Algunas de estas decisiones no son fáciles, claramente no son gratis, cada una de ellas tiene
ventajas e inconvenientes, por ello lejos de proponer implementarlas a ojos cerrados, lo que
propongo es evaluarlas de manera diligente siendo conscientes de que el nivel de inversión en
Colombia es extraordinariamente bajo, y sólo con mucha mayor inversión tendremos el
desarrollo económico y social que deseamos, y que los colombianos y las colombianas
necesitan urgentemente", finalizó Mario Pardo, presidente de la Junta Directiva de Asobancaria.