¿Alguna vez se ha preguntado en qué consiste el arte de la innovación? Intercambio de exploración y explotación
Recuerde, la innovación no se trata de un proceso lineal, sino de un ciclo dinámico que requiere de una constante adaptación.
Miércoles, Mayo 15, 2024
Hace algunos días estaba leyendo nuevamente el libro Hábitos Atómicos, de James Clear, y me llamó la atención que en uno de los capítulos se habla sobre tácticas avanzadas de cómo pasar de ser solamente bueno a ser verdaderamente grandioso. Allí plantea la siguiente pregunta: ¿cómo encontrar un juego en el que las probabilidades estén a tu favor?
Me sorprendió la gran similitud en los proceso de innovación que llevamos en compañías como Claro. En este dinámico mundo, la búsqueda constante por la mejora nos lleva a enfrentar nuevos retos. Para alcanzar el éxito sostenido, es crucial asegurarnos de estar en el "juego correcto", aquel que alinea nuestras habilidades, intereses y valores con las necesidades del mercado.
El método tradicional para encontrarlo suele ser de prueba y error. Sin embargo, el tiempo es un recurso limitado, y no podemos permitirnos explorar todas las posibilidades existentes. Afortunadamente, existe una estrategia más efectiva para navegar este enigma: el intercambio de exploración y explotación.
1. La fase de exploración: desenterrando oportunidades ocultas
Al iniciar un proceso de innovación es fundamental dedicarle un período de exploración. Esto implica experimentar, probar diversas ideas, investigar a fondo el mercado y las necesidades de los usuarios. En esta fase, es crucial adoptar una mentalidad abierta y receptiva a nuevas perspectivas.
2. La fase de explotación: refinando y escalando el éxito
Una vez identificada una solución prometedora, es momento de enfocar nuestras energías en explotar al máximo su potencial. Es decir, profundizar en el desarrollo de la idea, optimizar los procesos, perfeccionar la propuesta de valor y escalar el producto o servicio. Sin embargo, es importante no abandonar por completo la exploración. Continuar buscando nuevas formas de mejorar y adaptarse a las necesidades cambiantes del mercado.
3. Encontrando el equilibrio perfecto: adaptándose al ritmo de la innovación
El equilibrio ideal entre exploración y explotación depende de la etapa actual del proceso de innovación. Si se encuentra en las primeras etapas y aún está buscando una solución viable, dedique más tiempo a la exploración. En cambio, si ya ha validado una idea y está en fase de crecimiento, enfóquese en la explotación.
A largo plazo, la mayoría de los expertos coinciden en que la estrategia más efectiva consiste en dedicar entre el 80 y el 90% del tiempo a la explotación de la idea que le brinda mejores resultados, reservando el 10% o 20% restante para la exploración continua. Google es un claro ejemplo de la aplicación exitosa del intercambio de exploración y explotación, alientan a sus empleados a que el 80% de su semana laboral sea para tareas corporativas, mientras que el 20% restante lo destinan a proyectos de su propia elección, e, incluso, promueven una feria de proyectos fracasados, los cuales son expuestos a toda la organización
Recuerde, la innovación no se trata de un proceso lineal, sino de un ciclo dinámico que requiere de una constante adaptación. Aproveche al máximo sus habilidades, explore nuevas oportunidades y explote al máximo las ideas que le acercan al éxito. Nuestra mayor debilidad reside en rendirnos. La forma más segura de alcanzar el éxito es siempre intentarlo una vez más.