Comercio electrónico creció 10,8% y consolida su peso digital en 2025

El comercio electrónico cerrará 2025 como uno de los pilares de la economía digital en Colombia. Según la Cámara Colombiana de Comercio Electrónico (CCCE), el sector creció 10,82% al terminar el tercer trimestre, pese a la volatilidad económica, la inflación y las variaciones del tipo de cambio. La adopción tecnológica, la expansión de plataformas y la creciente confianza del consumidor fueron determinantes para sostener el ritmo de crecimiento. 

Para María Fernanda Quiñones, presidenta ejecutiva de la CCCE, el ecommerce pasó de ser un canal alterno a convertirse en un catalizador de productividad y equidad. “Creer en el comercio electrónico es creer en el potencial productivo del país. Hoy, el ecommerce impulsa competitividad, inclusión y formalización. Ya no se trata solo de digitalizar procesos, sino de construir relaciones de confianza entre empresas y consumidores”, afirmó. 

Más confianza, más categorías y más compras responsables

A lo largo del año, los consumidores colombianos ampliaron sus categorías de compra, desde moda y tecnología hasta productos locales y sostenibles. La demanda ya no se centra únicamente en precio o conveniencia: factores como confianza, trazabilidad, sostenibilidad y buenas prácticas logísticas se volvieron decisivos al momento de comprar en línea.

Eventos como HotSale, Travel Sale y el eCommerceFest demostraron la capacidad del canal digital para dinamizar el comercio, aumentar la visibilidad de marcas locales y acelerar tendencias de consumo responsable. El gremio señala que la logística nacional se está adaptando a entregas más rápidas, eficientes y sostenibles, reforzando la competitividad del ecosistema. 

Competencia global en ascenso: el impacto de Temu, Shein y AliExpress

El auge de plataformas como Temu, Shein, AliExpress y Alibaba redefinió la dinámica competitiva. Su capacidad para ofrecer precios bajos y catálogos amplios atrajo a millones de consumidores colombianos, intensificando el debate sobre competencia justa, regulaciones aduaneras y la necesidad de fortalecer la competitividad del comercio electrónico nacional. 

Avances regulatorios: gobernanza digital y reformas clave

En 2025, el país avanzó en discusiones sobre gobernanza digital, libertad de expresión y protección al usuario, impulsadas por diálogos multisectoriales liderados por la CCCE. Las reformas tributarias que impactan la cadena de valor del ecommerce se convirtieron en temas centrales para asegurar un entorno más equilibrado, competitivo y transparente.

La confianza digital emergió como eje articulador del sector: empresas reforzaron ciberseguridad, optimizaron pasarelas de pago y fortalecieron sus políticas de atención al cliente para responder a usuarios cada vez más exigentes. 

Inclusión digital: mipymes y territorios ganan protagonismo

El año estuvo marcado por una mayor adopción tecnológica entre mipymes, especialmente en zonas rurales y agroindustriales. Iniciativas como YaEstoyOnline.co, con módulos de agro digital, turismo digital e inteligencia artificial, y programas como eXporta.online permitieron que pequeños negocios accedieran a nuevos mercados.

La reducción de brechas sigue siendo un desafío, pero el aumento del acceso a Internet y la disponibilidad de herramientas digitales impulsó una participación más equitativa en la economía digital. El reto, señala el gremio, es que las personas usen la tecnología no solo para comunicarse, sino para aprender, emprender y generar ingresos, mientras las empresas, en especial las pequeñas y medianas, avanzan en su transformación digital. 

Un año decisivo y un reto hacia 2026

Para Quiñones, el balance deja un escenario optimista: “El comercio electrónico se afianza como parte integral del consumo colombiano. El reto hacia 2026 será mantener el ritmo de innovación y fortalecer la competitividad local frente a grandes jugadores internacionales. Colombia tiene las capacidades y el talento para liderar la región en economía digital”.