Nuevo decreto golpea la liquidez de las MiPymes: claves para sobrevivir

El reciente Decreto 0572 de 2025, emitido por el Ministerio de Hacienda el pasado 28 de mayo, ha encendido las alarmas en el ecosistema empresarial al modificar los porcentajes de autorretención en la fuente y ajustar las bases de retención en diversos sectores. El objetivo del Gobierno es incrementar el recaudo del impuesto de renta de manera anticipada, pero la medida pone en riesgo la liquidez de las micro, pequeñas y medianas empresas, según el Observatorio Nacional de la MiPyme.

El decreto obliga a las MiPymes a anticipar el pago del impuesto de renta en función de sus ingresos brutos, lo que impacta directamente su flujo de caja. “Cuando se presiona la caja de las MiPymes con impuestos anticipados, lo que realmente se pone en juego es su capacidad de sostenerse en el tiempo”, señaló Nicolás Villa, CEO de Platam.

Liquidez: una necesidad de supervivencia, no un lujo

En este contexto, las herramientas financieras como factoring digital, confirming y BNPL (Buy Now, Pay Later) emergen como soluciones clave. “Estas herramientas no generan deuda a largo plazo, sino que ayudan a anticipar ingresos o postergar egresos de forma controlada, permitiendo que las empresas sigan cumpliendo sus compromisos sin frenar su funcionamiento”, afirmó Villa.

La urgencia es evidente: cerca del 70 % de las MiPymes enfrenta dificultades para acceder a crédito formal, según Confecámaras, y el Banco de la República reportó un crecimiento real de la cartera comercial de solo 2,5 % en el primer trimestre de 2025, el nivel más bajo en cinco años.

Las MiPymes deben digitalizar su gestión financiera, activar alertas tempranas y apoyarse en soluciones colaborativas para resistir los nuevos desafíos fiscales. Como concluye el análisis, “garantizar la liquidez de las MiPymes no es solo una política inteligente, es una apuesta por el desarrollo económico real”.