Adriana Narváez, People Director de Andean WAVIN

¿Cuál es el reto más importante al que se enfrenta como mujer ocupando un cargo directivo en una empresa?

Cuando una mujer ocupa un cargo de liderazgo, enfrenta varios retos. Uno de ellos, las brechas importantes de género y discriminación aun existentes en nuestra cultura latinoamericana. Es usual enfrentar sesgos y estereotipos respecto a las capacidades y competencias para dirigir, sobre todo en sectores y entornos predominantemente masculinos, donde se pueden percibir barreras para contratación, ascensos, promociones, reconocimiento de logros y la inclusión en la toma de decisiones, esto lleva a limitar los espacios de desarrollo personal y profesional para este grupo poblacional.

En el sector industrial y de construcción, incluso, algunas carreras como las STEM, han sido culturalmente asociadas al género masculino, lo cual impacta directamente en el desarrollo profesional de las mujeres que se desempeñan en estas profesiones.

Asimismo, se enfrentan otros desafíos como lograr el equilibrio entre la vida laboral y personal, sobre todo en los sectores y posiciones que demandan jornadas laborales intensas, viajes y disponibilidad constante, en donde las mujeres además de responder a su rol directivo afrontan las demandas familiares con el gran reto de lograr dicho balance en estos dos ámbitos. 

¿Cuáles son las principales habilidades o cualidades que una mujer líder debe cultivar para destacarse en el ámbito empresarial?

Para destacarse como líder en los sectores industriales y de construcción, así como en otros ámbitos empresariales, las mujeres deben desarrollar diversas habilidades y cualidades para sobresalir, de las cuales destaco tres:

1. Inteligencia emocional para establecer relaciones sólidas a largo plazo y promover la solución de conflictos de manera constructiva, ayudando a conseguir un ambiente de trabajo productivo y armonioso.
2. Pensamiento estratégico: ser visionario, pensar a largo plazo, estar diez pasos adelante y anticiparnos a las tendencias y cambios que se presentan en el mercado para tomar decisiones correctas y orientar a nuestros equipos de trabajo alineados con la visión global de la compañía es un reto al cual nos vemos enfrentados en nuestro día a día. Estamos en un mundo cambiante en el cual contar con una visión clara, tomar decisiones difíciles, empoderar de manera efectiva y fomentar ambientes de trabajo creativos y colaborativos que promuevan la innovación, son factores clave.
3. Generar credibilidad. Desde nuestro rol, trabajamos constantemente para influir positivamente en nuestros colaboradores, pares y líderes. La confianza en nosotras mismas y ser valientes en nuestras acciones, juega un rol valioso y tiende el puente de comunicación transparente con nuestros stakeholders. De esta forma, podremos dirigir de manera más efectiva nuestros equipos, mantenerlos motivados y desarrollarlos de tal manera que continuemos creciendo juntos para responder a las necesidades del mercado, que cada vez es más exigente. 

¿Qué medidas podrían implementarse en una empresa para promover una mayor representación de mujeres en posiciones de liderazgo?

Para promover una mayor representación de mujeres en posiciones de liderazgo, requerimos un enfoque integral, que involucre barreras estructurales, culturales y personales, como, por ejemplo, establecer metas claras y la revisión de políticas de Diversidad, Equidad e Inclusión. Al contar con objetivos específicos para incrementar el número de mujeres en puesto de liderazgo, se podrá medir el progreso y las políticas, ayudarán a eliminar sesgos de género en la contratación, para garantizar más oportunidades, promoviendo de esta manera aumentar el porcentaje de mujeres en las organizaciones, su desarrollo y retención en roles de liderazgo.

En este sentido, debemos darles herramientas para que una vez posicionadas, puedan responder a las necesidades del entorno; por ello, es importante desarrollar programas de mentoría, donde tengamos líderes de diferentes géneros proporcionando orientación, soporte y oportunidades de desarrollo profesional. Es importante tener en cuenta, que algunos programas se pueden extender a otros stakeholders, como las esposas e hijas de los trabajadores, proveedores y comunidades vecinas para promover el empoderamiento femenino y ampliar el impacto social.

Finalmente, dentro de las estrategias para afrontar los nuevos retos a los que se exponen nuestras nuevas líderes, necesitamos ofrecerles programas de desarrollo en para así maximizar su potencial y prepararlas para asumir roles directivos, sin perder en el camino su esencia y logren de esta manera que su propósito cobre vida.

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