Los 'Camellos' están tomando el escenario en el mundo startup

En el vibrante mundo de las startups, los términos 'Unicornio' y 'Camello' están en boca de todos. Según el reciente Colombia Tech Report 2022-2023 de KPMG, Colombia ha visto un crecimiento del 19% en startups, alcanzando un total de 1.327. Pero, ¿qué está pasando en el panorama latinoamericano?

A pesar de que América Latina ha mostrado un crecimiento constante en el sector startup, solo cuenta con 26 emprendimientos que han alcanzado el codiciado estatus de 'Unicornio', es decir, una valoración superior a los 1.000 millones de dólares. Brasil lidera la lista con 16 de estos gigantes. 

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Sin embargo, el escenario económico global ha llevado a una disminución en la inversión de capital, haciendo que las startups se enfoquen más en mantener su estabilidad que en buscar financiamiento. Aquí es donde entran los 'Camellos', startups que, en lugar de depender de un flujo constante de inversión, han adaptado su modelo para ser más resilientes y autónomos. María Paula Peñaranda, líder de innovación en KPMG Colombia, nos ilustra: "Los 'Camellos' han surgido como una respuesta a la necesidad de adaptarse y mantenerse activos de manera independiente".

¿Es este cambio una buena noticia? Aunque algunos temen que los 'Camellos' puedan opacar la esencia de las startups tradicionales, conocidas por su crecimiento vertiginoso, la realidad es que estos nuevos jugadores están demostrando que se puede crecer de manera exponencial con modelos de negocio más sostenibles. Peñaranda añade: "No reemplazarán a los unicornios, pero han encontrado una forma diferente de sobrevivir, con objetivos centrados en la sostenibilidad y rentabilidad".

Con las recientes turbulencias económicas y la inflación, algunas startups han mostrado vulnerabilidades. Por ello, el modelo 'Camello' se presenta como una solución para enfrentar recesiones o eventualidades. "El éxito de una startup no solo radica en crecer rápidamente, sino en hacerlo de manera sostenible y con el apoyo adecuado", concluye Peñaranda.