El rol de la autogeneración y las comunidades en la transición energética
En esta columna me gustaría resaltar la importancia de la autogeneración en la transición energética e incentivar a las personas y empresas a instalar sistemas de autogeneración de energía.
Lunes, Junio 24, 2024
La autogeneración de energía desempeña un papel crucial en la transición hacia un modelo energético más sostenible y descentralizado a la vez que empodera a las comunidades y a las personas a tomar control de su propia producción y consumo de energía eléctrica. Lo anterior, se alinea con uno de los principales objetivos de transición energética y es poner a el usuario como centro de la transformación.
Por su parte, la Comisión de regulación de Energía y Gas (CREG) define autogeneración de energía como la actividad de producir energía eléctrica principalmente para atender sus propias necesidades de consumo. Sin embargo, en Colombia se permite a los autogeneradores tener una generación superior a sus necesidades de consumo y entregar estos excedentes a la red a cambio de una contraprestación monetaria.
De hecho, cada vez se habla más de autogeneración en el país y son más las personas y empresas que instalan desde un panel solar hasta una mini granja para autoconsumo. Según cifras de XM (administrador del mercado eléctrico Colombiano) la capacidad autogeneración de energía a pequeña escala ha crecido cerca de 40% en los últimos 11 meses. Existen diversas motivaciones que impulsan a adoptar la autogeneración como lo son:
• Contribuir a la reducción de la huella de carbono y disminuir la dependencia de combustibles fósiles
• El reconocimiento por implementar iniciativas de responsabilidad social ambiental
• Buscar un ahorro económico en la factura de energía
Destacando que al instalar un sistema de autogeneración puede producir ahorros de hasta el 70% en el valor de la factura de energía.
En esta columna me gustaría resaltar la importancia de la autogeneración en la transición energética e incentivar a las personas y empresas a instalar sistemas de autogeneración de energía. Instalar sistemas de autogeneración aumenta la competitividad y reduce costos; aumenta la resiliencia y la flexibilidad en el sistema. Esto se traduce en una mayor seguridad energética y en una menor vulnerabilidad frente a eventos climáticos extremos u otras crisis.
Otro aspecto clave de la autogeneración de energía es su potencial para democratizar el acceso a la energía y promover mayor equidad energética. Al permitir que las personas y las comunidades generen su propia electricidad, se rompen barreras de entrada tradicionales en el sector energético.
En conclusión, la autogeneración de energía no solo representa una oportunidad económica tangible, sino que también es un mecanismo para avanzar hacia un futuro energético más sostenible y resiliente. Al adoptar sistemas de autogeneración, estamos reduciendo costos y mejorando la seguridad energética, así como empoderando a las comunidades para que sean parte activa de la transición energética. Este cambio de paradigma, donde el consumidor se convierte en productor, es fundamental para enfrentar los desafíos climáticos y energéticos del presente y del futuro. Es el momento de actuar y aprovechar las múltiples ventajas que la autogeneración de energía solar ofrece.