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Violencia de género sector salud: alerta por cifras y llamado urgente a actuar
La violencia de género sector salud exige acción inmediata: 20 % de mujeres afectadas y sistemas de salud llamados a prevenir, detectar y proteger.
Martes, Diciembre 9, 2025
La violencia de género sector salud volvió al centro del debate público en Colombia y el mundo. Según cifras presentadas en el marco de la campaña ÚNETE de Naciones Unidas, cerca del 20 % de las mujeres sufre algún tipo de violencia y el 30 % de las mayores de 15 años la ha experimentado en algún momento de su vida. A nivel global, esto equivale a 840 millones de mujeres afectadas. El foco de 2025 está en la violencia digital, que con creciente frecuencia deriva en agresiones físicas, coacción e incluso femicidios.
La iniciativa, que se desarrolla del 25 de noviembre al 10 de diciembre, busca movilizar a gobiernos, sector privado, medios y ciudadanía para enfrentar un problema que Naciones Unidas considera una emergencia humanitaria de derechos humanos. AFIDRO, la Asociación de Laboratorios de Investigación y Desarrollo, se sumó al llamado para fortalecer el rol del sector salud en la prevención y atención integral.
El papel del sector salud en la detección y prevención de la violencia de género
Los servicios de salud suelen ser el primer punto de contacto para las mujeres que viven violencia. Su capacidad para identificar señales, ofrecer acompañamiento, activar rutas de atención y garantizar protección es determinante.
“Cada diez minutos una mujer o niña muere a manos de su pareja u otro familiar; mueren nueve veces más mujeres por violencia de género que en conflictos bélicos”, advirtió Mariana Sanz de Santamaría, directora de la ONG Poderosas, subrayando la urgencia de actuar y la necesidad de promover “microrevoluciones” que cuestionen comentarios, actitudes y comportamientos normalizados.
Las cifras del insumo muestran que:
37,3 % de las víctimas de violencia sexual son adolescentes entre 12 y 17 años.
75,7 % de las mujeres reportan manifestaciones psicológicas, físicas o negligencia.
Las agresiones se concentran en mujeres adultas entre 29 y 59 años (24,86 %).
Estas tendencias evidencian la necesidad de tamizaje sistemático, incorporación del enfoque de género en la atención médica y fortalecimiento de protocolos de acompañamiento.
Desigualdades persistentes y desafíos institucionales
Para Lupita León, gerente general de BMS Colombia y Perú, la industria farmacéutica debe crear espacios seguros, políticas de cero tolerancia y mayor conciencia organizacional, aunque reconoce que “aún queda un camino por recorrer, especialmente en desaprender la normalización de microviolencias”.
Desde una perspectiva de política pública, Diana Cárdenas, consultora y exdirectora de la ADRES, señala que las empresas pueden ser aliadas en la implementación de rutas de prevención. Sin embargo, advierte que las desigualdades de género continúan presentes incluso dentro de los servicios de salud, pese al aumento de mujeres en profesiones médicas.
La violencia digital: la nueva frontera de riesgo para mujeres y niñas
El énfasis de ONU Mujeres para 2025 está en la violencia digital, un fenómeno que escaló en los últimos años y que frecuentemente desemboca en amenazas físicas, extorsión, acoso, control coercitivo y femicidios. Los impactos se extienden a la salud mental, la estabilidad emocional, la participación social y el acceso a oportunidades.
Frente a ello, el sector salud requiere fortalecer protocolos de detección, integrar la salud mental como componente esencial y coordinarse con autoridades judiciales y territoriales para garantizar rutas seguras.
Un deber colectivo: llamado a empresas, instituciones y ciudadanía
El presidente de AFIDRO, Ignacio Gaitán, enfatizó que “todos tenemos un papel activo en la construcción de entornos seguros, saludables y libres de violencia”. Aseguró que eliminar la violencia no es solo un objetivo, sino un deber colectivo que exige colaboración intersectorial, diálogo continuo y acciones concretas desde hogares, comunidades, empresas e instituciones del Estado.
La campaña ÚNETE cierra el próximo 10 de diciembre, pero los desafíos persisten todo el año. Para el sector salud, la tarea es clara: detectar a tiempo, proteger sin revictimizar y acompañar con enfoque integral, contribuyendo a romper el ciclo de violencia que limita el bienestar, la autonomía y el futuro de millones de mujeres.