Negocios

Consumo en Colombia cierra 2025 con fuerte presión del costo de vida

Un informe de NIQ revela que, pese a la pérdida de ingresos y el alza en precios, el consumidor colombiano mantiene cautela, ajustes de gasto y un optimismo moderado para 2026.
Jueves, Diciembre 4, 2025

El consumo colombiano cerró 2025 con señales mixtas: un entorno económico retador, brechas marcadas entre grupos poblacionales y un optimismo aún presente frente al 2026. Según el informe Consumer Outlook: Guide to 2026, elaborado por NielsenIQ (NIQ), el 28% de los colombianos afirma estar hoy algo peor o mucho peor que hace un año, mientras un 29% se siente algo mejor y un 36% dice mantenerse igual. 

La radiografía general muestra un país dividido entre la presión del costo de vida y la esperanza de recuperación financiera. El estudio revela que las mujeres enfrentan el escenario más duro: el 34% perdió su empleo en los últimos tres años y continúa en la misma condición, frente a un 19% de los hombres.

El consumidor colombiano: cauteloso, luchador y con capacidad de adaptación

NIQ clasifica a los colombianos en cinco grupos:

  • Colombiano cauteloso (38%): ajusta gastos, prioriza necesidades básicas y reduce compras.

  • Colombiano luchador (26%): se sostiene pese a la presión económica.

  • En recuperación (18%): perdió ingresos en los últimos años pero logró estabilizarse.

  • Sin cambios (11%): mantiene niveles similares a años anteriores.

  • Exitoso (6%): estabilidad económica y gasto menos restringido. 

El costo de vida sigue siendo el detonante principal del deterioro financiero: el 65% lo señala como su mayor factor de afectación, seguido por la inseguridad laboral (43%) y la desaceleración económica (36%).

Preocupaciones para 2026: precios, empleo y riesgo de recesión

Las principales angustias de los consumidores para los próximos seis meses se concentran en:

  • Aumento de precios de alimentos (12%)

  • Temor a una recesión económica (11%)

  • Seguridad laboral (10%)

  • Capacidad de cubrir necesidades básicas (9%)

  • Conflictos globales y tensiones geopolíticas (8%)

  • Incremento de costos de vivienda (7%) 

Por género, las diferencias son contundentes: la seguridad laboral preocupa al 12% de las mujeres, frente a solo el 8% de los hombres. El costo de la vivienda inquieta al 10% de ellas, pero apenas al 5% de ellos.

Ajustes de gasto: dónde recortan los colombianos

El informe revela una reducción marcada en categorías asociadas al ocio y consumo discrecional:

  • Comidas fuera de casa (46%)

  • Entretenimiento presencial (45%)

  • Celebraciones y ocasiones especiales (44%)

  • Electrodomésticos grandes (44%), cifra por encima del promedio latinoamericano (39%)

  • Comida a domicilio (43%)

En contraste, los gastos que menos estarán dispuestos a recortar están ligados a la salud, el bienestar y la educación: solo un 14% disminuirá inversión en educación y un 16% en atención médica. 

Optimismo moderado: 61% espera una mejora en 2026

Pese al panorama desafiante, el consumidor colombiano muestra resiliencia: 61% cree que su situación financiera mejorará a comienzos de 2026, y solo un 14% anticipa un deterioro. Las mujeres, aunque más afectadas, son las más optimistas: el 66% piensa que su economía estará mejor, frente a un 57% de los hombres. 

Para Marta Cyhan-Bowles, directora de Comunicaciones y Marketing Global COE en NIQ, “las marcas pueden ganarse la lealtad del consumidor generando confianza y ofreciendo valor más allá del precio”.