¿Emprendes desde el propósito?
Emprender desde el propósito no solo hace que la compañía perdure en el tiempo, sino que además genera un enorme diferencial en el mercado.
Martes, Mayo 14, 2024
Ideas y negocios se crean todos los días cómo te podrás imaginar. Solo calcula cuántas ideas de negocio puede concebir una sola persona al día. Además, si esa persona tiene determinación, imagina cuántas de esas ideas se transforman en emprendimientos reales.
Este panorama es realmente inspirador desde la perspectiva de innovación y transformación en nuestras vidas y nuestro planeta.
Ahora, desafortunadamente muchos de esos negocios no perduran más allá del año tres o cinco. Razones pueden existir muchas, sin embargo, lo que hemos visto es que varios se crean porque lo ven como un posible negocio rentable, pero no encuentran un motor mayor que eso. La buena noticia es que existe un motor superior al que llamamos propósito.
Emprender desde el propósito no solo hace que la compañía perdure en el tiempo, sino que además genera un enorme diferencial en el mercado. Ahora, la ganancia mayor es que trabajas en algo que te apasiona, tienes talento y realmente lo disfrutas. Emprender implica esfuerzo, dedicación y compromiso, estas características no son posibles sin tener un propósito claro.
Antes de lanzar un negocio, debes hacer un trabajo interior y conocerte, debes preguntarte si esa idea cumple tu propósito en el mundo, si con esta idea realmente puedes servir, contribuir a las personas o a la sociedad y de esta manera entregar tus talentos al mundo. Cuando una persona entrega sus dones al mundo, vive desde el propósito. Las personas siempre tienen su propósito de manera inconsciente, pero a veces es difícil escucharlo.
Estas 3 preguntas pueden generar claridad:
1. Pasado: Cuando eras pequeño, ¿Qué querías hacer cuando grande?
2. Presente: Perdemos la noción de tiempo cuando estamos haciendo ciertas actividades. ¿Cuáles son esas actividades?
3. Futuro: ¿A qué dedicarías tu vida si ganarás 100 M USD? ¿En qué negocios lo invertirías?
Pero repito, nuevamente el propósito es ese estado en el qué me gusta lo que hago, me apasiona, soy bueno y es servicio para las personas, comunidad o planeta.
Algunos ejemplos de empresas con propósito que he conocido. Un hombre que quiere hacer la vida de las personas más independiente usando energía solar.
Una mujer que creó una marca de maquillaje libre de crueldad animal y completamente vegana. Una mujer que creó una consultoría para implementar responsabilidad social en las empresas. Y así, verás ejemplos en todo el mundo y alrededor tuyo.
Ahora, si ya tienes un negocio andando, evalúa porque lo creaste, qué propósito estás buscando cumplir con él y genera un impacto mayor en las personas y en el mundo.