El salario mínimo en Colombia era de los más bajos en la región

foto de una gráfica con varias gráficas encima de países

Colombia se posiciona como uno de los siete países con los salarios mínimos más bajos en América Latina, según datos recientes que analizan la remuneración mínima en la región. En un ranking encabezado por Venezuela, seguido por Argentina, República Dominicana, Brasil y Perú, Colombia ocupa el sexto lugar, por delante únicamente de Panamá. Este panorama pone de manifiesto los retos económicos y sociales que enfrenta el país en términos de poder adquisitivo y equidad laboral.

El salario mínimo en Colombia para 2025 se fijó en 1.160.000 pesos mensuales (aproximadamente USD 270), un aumento frente al año anterior, pero aún insuficiente para garantizar una mejora sustancial en la calidad de vida de los trabajadores. A pesar de los ajustes anuales, el ingreso mínimo continúa enfrentando desafíos frente a la inflación, que erosiona su capacidad de compra, y frente a las comparaciones regionales, donde países con economías similares logran mayores avances en materia de remuneración.

Este bajo posicionamiento también refleja limitaciones estructurales en el mercado laboral colombiano. A pesar de ser la cuarta economía más grande de América Latina, el país enfrenta altos niveles de informalidad, que afectan a casi el 60 % de la población activa, y dificultan que las políticas salariales tengan un impacto amplio. Además, las desigualdades regionales y las brechas urbanas-rurales acentúan las dificultades económicas de los trabajadores con salarios mínimos.

En este contexto, el reto para Colombia no solo radica en incrementar el salario mínimo, sino en implementar políticas integrales que fortalezcan la formalidad laboral, controlen la inflación y promuevan la productividad. Solo así será posible mejorar el bienestar de los trabajadores y posicionar al país en un lugar más competitivo dentro de la región, contribuyendo al desarrollo económico y social sostenido.