Negocios
Liderazgo adaptativo emerge como clave del futuro laboral
El liderazgo adaptativo se consolida como competencia clave ante la reconversión de habilidades y la convivencia multigeneracional en las empresas.
Sábado, Diciembre 20, 2025
El liderazgo adaptativo se posiciona como una de las competencias más determinantes para la sostenibilidad de las organizaciones en un entorno laboral marcado por la transformación tecnológica, la reconversión de habilidades y la convivencia de múltiples generaciones. Según el Future of Jobs Report 2025 del World Economic Forum, el 50 % de los trabajadores necesitará reconvertir sus habilidades antes de 2027, una cifra que dimensiona la magnitud del reto empresarial.
En este escenario, dirigir equipos ya no consiste solo en gestionar procesos, sino en interpretar contextos cambiantes y alinear personas con realidades diversas.
Liderazgo adaptativo: respuesta a equipos multigeneracionales
La coexistencia de distintas generaciones dentro de las organizaciones plantea desafíos crecientes. Mientras los colaboradores más jóvenes priorizan flexibilidad, transparencia y retroalimentación constante, los perfiles con mayor trayectoria suelen valorar estabilidad, estructura y formalidad.
De acuerdo con un informe de Revista Recursos Humanos (2025), el 93 % de los líderes a nivel global considera la adaptabilidad estructural una prioridad crítica, lo que evidencia un consenso sobre la necesidad de nuevos modelos de liderazgo.
“Si no hay una estrategia clara, se generan fricciones que afectan lo más complejo dentro de cualquier organización: el ser humano”, señaló Diego Bernal, socio de Gente y Cultura de BDO en Interaméricas.
Qué define a un líder adaptativo
El liderazgo adaptativo se caracteriza por una serie de prácticas que buscan equilibrar productividad y bienestar:
Priorizar el bienestar, el aprendizaje y el crecimiento del equipo, creando entornos psicológicamente seguros.
Fomentar la colaboración entre generaciones, integrando innovación y experiencia.
Impulsar la mentoría inversa, donde los colaboradores jóvenes aportan habilidades digitales y nuevas formas de comunicación.
Flexibilidad para alcanzar resultados, explorando formas distintas de trabajar y liderar.
Estas prácticas permiten reducir tensiones internas y fortalecer la cohesión en equipos diversos.
Cultura organizacional como habilitador
Más allá del estilo de liderazgo individual, la cultura organizacional juega un rol decisivo. Empresas que promueven comunicación abierta, inclusión y respeto mutuo logran que sus equipos se sientan escuchados y valorados.
“La cultura organizacional es determinante para que un equipo multigeneracional funcione”, añadió Bernal, al destacar que la confianza y la participación activa son factores críticos para el desempeño colectivo.
Algunas organizaciones ya avanzan hacia modelos donde los colaboradores en etapas tempranas de su carrera participan activamente en la toma de decisiones estratégicas. Estas dinámicas intergeneracionales han permitido que ideas surgidas desde las bases lleguen a instancias directivas, fortaleciendo la cohesión interna y habilitando procesos de innovación más abiertos.
Anticipar el cambio como ventaja competitiva
El liderazgo adaptativo no se limita a reaccionar ante la transformación del trabajo. Su valor estratégico radica en anticipar escenarios, integrar perspectivas diversas y convertir la diferencia generacional en una fuente de innovación.
“El liderazgo adaptativo no se trata solo de responder al cambio, sino de anticiparlo, integrando perspectivas diversas para obtener mejores resultados”, concluyó Bernal.
En un contexto de cambio acelerado, la capacidad de adaptación se consolida como una ventaja competitiva clave para las organizaciones del futuro.