2026 el año de la IA útil, los datos monetizables y la hiperpersonalización
En 2026, la tecnología será el ADN de las empresas líderes: IA generativa, datos y personalización marcarán la nueva era de la competitividad.
Lunes, Octubre 27, 2025
En un entorno donde los cambios tecnológicos ya no son una opción sino una constante, las empresas que aspiren a liderar deberán tener la tecnología en su ADN. Dejarán atrás los pilotos para enfocarse en resultados tangibles y escalables. Desde Keyrus, identificamos cinco grandes tendencias tecnológicas que definirán el rumbo de la innovación en 2026 y que deben estar en el radar de cualquier organización que quiera mantenerse competitiva en Latinoamérica y el mundo.
1. La IA generativa deja de ser experimento: se vuelve operativa
La inteligencia artificial generativa (GenAI) evolucionará rápidamente de ser una promesa experimental a una herramienta productiva y transversal. Gartner estima que para 2026, más del 80% de las organizaciones habrán adoptado APIs, modelos o aplicaciones habilitadas por GenAI en entornos reales, frente a menos del 5% en 2023.
Esto transformará la forma en que operan las compañías: automatización de procesos complejos, generación de contenido contextualizado y análisis predictivos en tiempo real. Ya no se tratará de preguntar “¿qué puede hacer la IA?”, sino “¿cómo la ponemos a trabajar de forma eficiente para nosotros?”. El reto será operacionalizarla, conectarla con los datos adecuados y medir su impacto más allá de la innovación.
2. Hiperpersonalización en tiempo real: cada cliente, una experiencia única
La personalización dejará de ser un diferencial para convertirse en expectativa. En 2026, las marcas más competitivas serán aquellas capaces de ofrecer experiencias altamente personalizadas en tiempo real, utilizando datos propios (first-party data), algoritmos de IA y contextos dinámicos de interacción.
Este nivel de sofisticación permitirá adaptar no solo productos y contenidos, sino también canales, frecuencia y tono de comunicación según cada usuario. Según McKinsey, las empresas que dominan la personalización tienen un 40% más de ingresos que sus pares menos avanzados.
3. Infraestructura de datos robusta y escalable
La sofisticación tecnológica exige cimientos sólidos. Para que la IA generativa y la hiperpersonalización funcionen, las organizaciones deberán invertir en arquitecturas de datos modernas: híbridas, componibles y listas para escalar.
Gartner anticipa que para 2026, las empresas que adopten prácticas avanzadas de ingeniería de IA y arquitecturas adaptativas serán al menos un 25% más ágiles en su capacidad de desplegar soluciones frente a sus competidores. Esto implicará pasar del dato almacenado al dato disponible, gobernado y preparado para impulsar decisiones en todos los niveles.
4. Los datos como nuevo producto: monetización y modelos de negocio
Los datos dejarán de ser únicamente insumos para la toma de decisiones internas. Cada vez más, veremos cómo se convierten en productos en sí mismos: desde servicios basados en inteligencia de datos hasta modelos de monetización a través de marketplaces, suscripciones o alianzas interempresa.
En 2026, las organizaciones más visionarias no solo usarán los datos para operar mejor, sino también para abrir nuevas líneas de negocio, crear valor compartido y habilitar ecosistemas colaborativos.
5. MarTech integrado y modular: eficiencia, personalización y escala
El ecosistema de tecnología de marketing (MarTech) entrará en una nueva era, marcada por la integración y la modularidad. Forrester afirma que las organizaciones que adoptan arquitecturas composables logran mejorar hasta un 25% la eficiencia operativa y la conversión de campañas.
En paralelo, Gartner proyecta que el gasto global en MarTech superará los 500 mil millones de dólares para 2027, impulsado por la necesidad de conectar datos, canales y automatización en tiempo real. La clave será construir ecosistemas donde todas las herramientas hablen un mismo idioma: el del cliente, su contexto y su comportamiento.
En conjunto, estas cinco tendencias muestran un panorama en el que la tecnología ya no es sólo soporte: se convierte en motor de negocio, experiencia y competitividad. En 2026, las organizaciones líderes no serán las que tengan más tecnología, sino las que logren convertirla en un motor operativo, comercial y estratégico.