Música artificialmente inteligente

Hace unos años, cuando La inteligencia Artificial aun era un mundo oscuro e intangible, un caso publicitario ganador de múltiples premios, llamó mucho la atención.

El caso se llamaba “The Next Rembrandt” y era un cuadro realizado con inteligencia artificial que “alimentaran” con toda la obra del artista neerlandés. El “cuadro”, realizado en 2016 fue tal cual como si el artista aún estuviera vivo y hubiera pintado su última obra.

La Inteligencia Artificial no solo nos ha sorprendido, sino también asustado. A muchos ha corrido de sus puestos de trabajo y a otros muchos se los ha facilitado. Hay quienes aún se indignan de todo lo que esta puede hacer y prefieren hacerse a un lado. Hay quienes optan por convertirse en detractores sin darse cuenta del riesgo de quedar obsoletos al que se exponen sin importar qué hagan o a qué se dediquen.

Hace unos días, fuimos testigos de un suceso sin precedentes, pues al artista de reggaeton más famoso del mundo, una inteligencia artificial le ganó un pulso con una canción. 

A pesar de toda la prensa que puede tener Bad Bunny y el aparente éxito asegurado con cualquier nuevo lanzamiento, su último álbum no gustó tanto como los anteriores. 

Razón por la cual, algún fan desencantado, quiso hacer su propia versión de una canción que él mismo compuso y que cantara la voz de “Bad Bunny” gracias a la inteligencia artificial. La sorpresa fue que esta canción gustó tanto en TikTok, que se viralizó. Tanto así, que al artista no le hizo nada de gracia y hasta despotricó de ella en sus redes sociales, logrando únicamente hacerla aún más famosa.

Hoy en cuestión de segundos, es posible escuchar cualquier cosa que queramos en la voz de quien queramos. Es por esto que es muy común escuchar versiones de artistas ya fallecidos de canciones actuales. Escuchar la voz de Freddy Mercury cantar La gata bajo la lluvia, no solo es divertido sino también sorprendente. O hacer que la voz de Homero Simpson o Gokú sean las que interpreten canciones de todo tipo, hace que quienes saben utilizar la inteligencia artificial, no solo se diviertan sino también generen cada vez más contenido. Esto solo por mencionar algunos usos divertidos y hasta controversiales en los que la inteligencia artificial logra cosas antes impensadas.

Así como el caso de Bad Bunny fue controversial y generó polémica además de dejar incómodo al artista, también hace unos meses fuimos testigos de una posibilidad mágica en términos musicales y nostálgicos.

Después de muchos años, el cuarteto más famoso de la historia, con dos de sus integrantes ya fallecidos, lanzó una “nueva” canción. 

The Beatles, el año pasado tomó una grabación en cassette de 1978 de John Lennon cantando y tocando el piano. Gracias a la tecnología con la que hoy contamos, se pudo aislar la voz del artista ya fallecido, cambiar un par de versos y completarla. Adicional, se le agregaron unos sonidos originales de guitarra tocada en 1995 por George Harrison, el otro integrante ya fallecido también. 

Gracias a los genios de la producción musical, la voluntad de los dos Beatles aún vivos (Paul y Ringo) que tocaron el resto de instrumentos y cantaron lo que faltaba, la tecnología y el uso de la inteligencia artificial, pudimos disfrutar de una nueva canción “original” de la banda más famosa de todos los tiempos. 

Now and then, como se llama la canción, además de emocionarnos, es tal cual un reencuentro musical y lírico de este cuarteto, entre ellos y con nosotros sus fans.

Podemos contar infinidad de situaciones y casos en los que la inteligencia artificial ha entrado a jugar parte importante de la creación artística en los últimos tiempos, poniendo un nuevo ingrediente a la tan difícil fórmula del entretenimiento artístico. Gratis no es que cada vez sea más frecuente la discusión sobre la regulación de la inteligencia artificial, pues las implicaciones legales, de derechos de autor, e incluso de competencia inequitativa están a plena luz del día.

Así, con todo esto, se crean muchas dudas.

¿Podríamos pensar que cada vez será más difícil que nos guste la música que saquen nuestros artistas preferidos? Pues tenemos la posibilidad de hacerla nosotros mismos a nuestro gusto. 

¿Están los abogados listos para todo este tipo de discusiones legales? 

¿Seguirá la inteligencia artificial ganándole el pulso a Bad Bunny?

¿Deberán los premios Grammy crear la categoría mejor “creación artificial”?

¿Será que muchos artistas doblegados por la inteligencia artificial, ya dejaron de crear canciones hace un buen tiempo y lo que conocemos, es realmente creación de la IA?

Por lo pronto, haré eco de lo que dijo hoy Alejandro Marín: “Dice mucho del estado de la música en la actualidad que el momento más importante de los #Grammy2024 haya sido una canción de 1988”.