Actualidad

Espionaje empresarial se perfila como la mayor amenaza cibernética para Colombia en 2026

El espionaje a grandes grupos empresariales emerge como la principal amenaza cibernética para Colombia en 2026, en un contexto de ataques récord y baja prevención.
Miércoles, Diciembre 24, 2025

Colombia se encamina a enfrentar uno de los mayores desafíos de ciberseguridad de su historia reciente. El espionaje a grandes grupos empresariales, impulsado por el uso malicioso de inteligencia artificial y el exceso de exposición digital, se perfila como la principal amenaza cibernética para 2026, según análisis del sector y reportes internacionales sobre el comportamiento del cibercrimen en la región.

Las cifras dimensionan la magnitud del riesgo. Solo durante el primer semestre de 2025, el país registró 7.100 millones de intentos de ciberataques, ubicándose como el tercer país más atacado de América Latina, de acuerdo con datos de FortiGuard Labs. A esto se suma que las organizaciones en la región enfrentan en promedio 2.560 ataques semanales, un 40% por encima de la media global.

Colombia, en el radar de los ataques sofisticados

La amenaza ya no se limita a fraudes aislados o interrupciones operativas. Los ataques evolucionaron hacia estrategias de espionaje empresarial, orientadas a obtener información sensible sobre decisiones corporativas, expansiones, fusiones, cadenas de suministro y activos críticos.

Informes recientes ubican a Colombia entre los cinco países más afectados por ataques de ransomware en Latinoamérica, junto con Brasil, México y Chile. El impacto económico tampoco es menor: las pérdidas por cibercrimen en la región superaron los USD 10.500 millones en 2025, triplicando los registros del año anterior.

Según Stefanini Group, esta tendencia continuará en ascenso si las empresas mantienen esquemas de defensa reactivos y fragmentados. “La inacción o la respuesta tardía deja a los grupos empresariales expuestos a daños profundos y, en muchos casos, irreversibles”, advierte Leidivino Natal da Silva, CEO global de Stefanini Cyber.

IA: habilitador estratégico y nuevo vector de riesgo

El avance de la inteligencia artificial ha elevado el nivel de sofisticación de los ataques. Herramientas automatizadas permiten a los ciberdelincuentes analizar vulnerabilidades, simular comportamientos humanos y evadir controles tradicionales con mayor facilidad.

Paradójicamente, la IA también se convierte en un factor crítico de defensa, siempre que se integre bajo un enfoque preventivo. El desafío para los líderes empresariales no es solo adoptar nuevas tecnologías, sino entender los riesgos asociados al manejo de datos, la identidad digital y los modelos generativos, que amplían la superficie de ataque si no se gobiernan adecuadamente.

De la reacción a la prevención: el cambio que exige la agenda C-Level

Uno de los hallazgos más relevantes del análisis es la baja inversión en prevención. Se estima que, aunque el gasto global en ciberseguridad para 2026 oscilará entre USD 200.000 y USD 500.000 millones, solo el 5 % se destinará a medidas preventivas.

El modelo emergente apunta a estrategias integrales que combinan capacidades de ataque (Red Team) y defensa (Blue Team) dentro de esquemas automatizados, conocidos como enfoques Purple Team. Estas metodologías permiten reducir alertas irrelevantes, acelerar la respuesta a incidentes y anticipar amenazas complejas que los sistemas tradicionales no detectan.

“La ciberseguridad debe entenderse como una función estratégica del negocio, no como un gasto tecnológico”, señala Natal da Silva. “La diferencia estará en la capacidad de anticiparse y tomar decisiones en tiempo real”.

2030 en el radar: soberanía de datos y cadena de suministro

Mirando hacia el final de la década, los expertos identifican tendencias que marcarán la agenda de ciberseguridad en la región:

  • Soberanía y geopatriación de datos, con regulaciones cada vez más específicas por país.

  • Verificación del origen digital y seguridad de la cadena de suministro, clave para industrias críticas.

  • Reducción de proveedores tecnológicos, en favor de modelos integrales que eviten la sobreposición de soluciones.

  • Gestión de identidades de máquinas y datos generados por IA, uno de los puntos más vulnerables del ecosistema digital.

En este contexto, Colombia busca fortalecer su posición regional. Para 2026, Stefanini Group anunció la instalación de un Centro de Operaciones de Seguridad (SOC) en el país, que se sumará a su red global de monitoreo y respuesta, con foco en sectores como banca y retail.

Una decisión estratégica impostergable

El espionaje empresarial deja de ser un riesgo hipotético para convertirse en una variable crítica de la estrategia corporativa. Para los líderes que definen la agenda de 2026, la ciberseguridad ya no es solo una cuestión técnica, sino un habilitador de continuidad, competitividad y confianza.

La pregunta que hoy se instala en las juntas directivas no es si el ataque llegará, sino qué tan preparados están los grupos empresariales para anticiparlo, contenerlo y seguir operando en un entorno cada vez más hostil.