Innovación
Ghosting, pornografía y manosfera: las alertas digitales de 2025
Especialistas advierten que prácticas digitales virales como el ghosting y la manosfera impactan negativamente las relaciones y la salud sexual.
Martes, Diciembre 30, 2025
Durante 2025, varias dinámicas digitales que ganaron popularidad en redes sociales y plataformas online encendieron alertas entre especialistas en salud sexual y bienestar emocional. De acuerdo con análisis clínicos de Boston Medical Group, algunas de estas prácticas, aunque normalizadas en entornos digitales, pueden deteriorar la forma en que las personas se relacionan y toman decisiones sobre su salud sexual.
El diagnóstico es claro: la viralidad no siempre va de la mano del bienestar, y ciertas tendencias refuerzan conductas de evasión emocional, desinformación médica y construcción de vínculos poco saludables.
Ghosting: la normalización de la evasión emocional
Una de las prácticas más extendidas es el ghosting, que consiste en desaparecer abruptamente de una relación sin explicación ni cierre. Aunque hoy se asocia principalmente a aplicaciones de citas y redes sociales, los especialistas advierten que su normalización debilita la comunicación asertiva y dificulta la construcción de relaciones sanas.
La ausencia de cierre emocional deja a una de las partes en incertidumbre, afectando la confianza y la estabilidad emocional, especialmente cuando estas dinámicas se repiten de forma sistemática.
Consumo compulsivo de pornografía y distorsión de la realidad
Otra tendencia señalada es el consumo compulsivo de pornografía, facilitado por el acceso inmediato desde dispositivos móviles. Los especialistas advierten que el consumo excesivo puede distorsionar la percepción del cuerpo, la intimidad y las relaciones reales, al tratarse de contenidos ficcionados.
La combinación de velocidad, privacidad e intensidad refuerza hábitos que pueden disminuir la sensibilidad frente a estímulos naturales y afectar la vida sexual fuera del entorno digital.
Retos virales y desinformación en salud sexual
Las redes sociales también amplificaron retos y consejos virales sin sustento científico, muchos de ellos relacionados con la sexualidad. Mitos como que “no masturbarse aumenta la testosterona” o prácticas sin evidencia médica circulan con facilidad y se replican sin verificación.
Según los especialistas, tomar decisiones sobre el cuerpo basadas en desinformación puede generar frustración, ansiedad y riesgos innecesarios para la salud.
Automedicación impulsada por influencers
Otra alerta se centra en seguir tratamientos recomendados por influencers sin consultar a un médico. En 2025, se evidenció un aumento en la automedicación con potenciadores sexuales promocionados en internet.
Algunos productos, incluso los presentados como naturales, contienen fármacos no declarados y cuentan con alertas sanitarias en distintos países. El uso sin supervisión médica puede derivar en dependencia, efectos secundarios y disfunción eréctil, advierten los expertos.
Manosfera: masculinidades basadas en discursos de odio
En el primer lugar del ranking aparece la manosfera, un conjunto de comunidades digitales que promueven discursos misóginos, estereotipos rígidos y una visión hostil de las relaciones.
Lejos de fortalecer la identidad masculina, estos espacios refuerzan el aislamiento emocional y la confrontación, generando una narrativa que debilita los vínculos afectivos y normaliza el rechazo a la empatía y al diálogo.
Un llamado a la educación y al pensamiento crítico
Frente a este panorama, los especialistas coinciden en la necesidad de fortalecer la educación sexual, el pensamiento crítico frente a los contenidos digitales y el acceso a información médica confiable.
El mensaje central es claro: no todo lo que se vuelve tendencia contribuye al bienestar, y en un ecosistema digital cada vez más influyente, la responsabilidad individual y colectiva frente al consumo de contenidos es clave para la salud emocional y sexual .